Por Alfredo Oropeza

Tras el período de resguardo domiciliario, derivado de la pandemia del Covid-19, en el municipio de Naucalpan repuntan los índices delictivos en homicidios, extorsiones, narcomenudeo, robo a negocios, violencia intrafamiliar y feminicidios.

En el 2019, con el gobierno municipal morenista se alcanzó el año más violento en la última década, donde las ejecuciones, el robo en transporte público y los asaltos en vía pública (a mano armada), fueron los delitos más cometidos.

Para el cierre del segundo tercio de 2020, el semáforo delictivo del Estado de México marca con focos rojos seis de los rubros de incidencia delictiva en Naucalpan.

En el caso de los homicidios, se han acumulado 81 ejecuciones hasta el cierre de julio, ocupando el segundo lugar estatal en incidencia delictiva. De lo anterior, destaca que mientras el promedio mensual de homicidios, en el período 2016-2018, fue de 10 casos por mes, en lo que va de la actual administración morenista el promedio mensual ascendió a 12 ejecuciones por mes; es decir, 20% superior al reflejado en el periodo anterior.

En cuanto a extorciones, durante el gobierno morenista este delito ha alcanzado niveles históricos, duplicándose el fenómeno respecto a la administración anterior y ocupando el tercer lugar de incidencia, a nivel estatal. Mientras en el período 2016-2018 sucedía un promedio de 6 casos de extorción al mes, actualmente se denuncian de manera oficial un promedio de 12.7 extorciones al mes; lo que significa un incremento de 112% respecto al gobierno anterior.

Actualmente, el fenómeno delictivo más alarmante en Naucalpan es el narcomenudeo, ya que es el que más ha crecido y se ha extendido en todo el territorio municipal, durante la presente gestión morenista. El fenómeno ha alcanzado cifras récord en los últimos dos años y ha colocado al municipio en el primer lugar estatal de incidencia delictiva, durante este gobierno.

La expansión del narcomenudeo en Naucalpan no es un fenómeno que se le puede achacar o endosar a la anterior administración municipal, como se estila en los gobiernos de 4Ta., debido a que los indicadores del semáforo delictivo del Estado de México muestran un claro y escandaloso ascenso, a partir de la instalación del actual gobierno morenista, en el municipio.

Mientras que en el período 2016-2018, el narcomenudeo en Naucalpan tuvo un promedio de 94 casos por año, en el primer año de gobierno morenista esa cifra ascendió a ¡880 casos! (en 2019); es decir, creció 440% respecto al año anterior (163 casos en 2018).

Y para el presente año, se prevé se alcance una nueva cifra récord en el incremento de las actividades de narcomenudeo, ya que hasta el mes de julio van acumulados 619 casos, por lo que el promedio anual podría proyectarse a ¡970 casos! durante los dos años de gobierno morenista en Naucalpan, diez veces superior al anterior.

Tras la pandemia y la Coronacrisis desatada en el país, el fenómeno de robo a negocios se ha disparado en el municipio, creciendo un 131% tan sólo en el lapso de mayo a julio y alcanzando un acumulado de 1,011 casos denunciados hasta julio del presente año, lo que coloca a Naucalpan en el segundo lugar estatal, en dicha incidencia delictiva.

Otro rubro desatendido y creciente, durante la gestión morenista en Naucalpan, es la violencia intrafamiliar; la cual se ha disparado durante los meses de confinamiento domiciliario, por causa de la pandemia del Covid-19, poniendo al municipio en el quinto lugar estatal en incidencias.

Mientras que en el período de la administración anterior (2016-2018) se contabilizó un promedio de 348 casos por año, al arranque de la presente administración morenista el fenómeno paso de 293 casos (en 2018) a ¡632 casos en 2019!, lo que significa un crecimiento del 115% en comparación al año anterior y, en lo que va del año 2020, se han acumulado 425 casos hasta el mes de julio, incrementándose el fenómeno al 66% durante los meses de confinamiento de abril a Julio.

Lamentablemente, después de dos años de la elección municipal de 2018 en Naucalpan, el gobierno que emanó de ella hizo oídos sordos a la principal demanda de los naucalpenses: Seguridad.

Lejos de concentrarse y atender el fenómeno de inseguridad como una prioridad, el gobierno municipal morenista ha relegado la prevención del delito como un tema de su total desinterés, distrayéndose en programas y acciones menos prioritarias para los vecinos de Naucalpan; ni siquiera podría decirse que “por lo menos invierten en obra pública”, para mejorar la infraestructura básica de las colonias.

Los números fríos están presentes, en el semáforo delictivo del Estado de México. En materia de seguridad pública en Naucalpan, nada ha cambiado, ni nada ha mejorado, sino todo lo contrario. La violencia y la inseguridad se han expandido y están dominando el territorio municipal, principalmente en narcomenudeo, extorsión, robo en transporte público y a negocios, homicidios, violencia intrafamiliar y feminicidios.